¿Cómo curar tu piercing?

Si te has hecho un piercing recientemente o si te está costando curarlo, lee nuestras recomendaciones para una curación perfecta. Nada más hacerte un piercing, el cuerpo enviará una respuesta inflamatoria a la zona, tu sistema inmunológico enviará a la zona histamina, bradiquinina y prostaglandinas. Estas sustancias hacen que los vasos sanguíneos dejen escapar líquido hacia los tejidos y causan inflamación y dolor. Pero no te preocupes, como cualquier herida del cuerpo, siguiendo unas pautas de curación, se solucionará y podrás lucir tus piercing y pendientes favoritos.

Con respecto a los piercing en la oreja, los situados en cartílago auricular suelen infectarse más que los del lóbulo debido a su avascularización. Infecciones de pequeña envergadura pueden progresar a pericondritis y abscesos, con lo que te recomendamos que sigas estos pasos de limpieza y cura desde el momento de realización de la perforación y hasta su completa cicatrización.

1. Lávate las manos

Antes de tocar la zona afectada con agua y jabón neutro al menos 20 segundos. Un piercing es una herida abierta, las manos o las uñas sucias pueden transferir bacterias a la zona.

2. Humedece la piel

Lo normal es que no se generen costras, pero si es tu caso, antes de continuar, humedece la piel alrededor del piercing para ablandar las costras y retíralas sin esfuerzo. Puedes utilizar una gasa o un bastoncillo, pero nunca las arranques ni las pinzas cuando estén secas.

3. Limpia la zona con suero fisiológico

Procura que entre en el orificio moviendo ligeramente el pendiente para que entre la solución.

4. Seca la zona

Seca la zona con una gasa con cuidado de no irritar la zona, nunca utilices las manos, toalla o algodones porque pueden dejar restos en la zona. Puedes utilizar también un secador de pelo a temperatura tibia.

5. Aplica alguna solución desinfectante.

Nosotros recomendamos después de haber observado cómo funciona, la solución After Piercing Care de Studex. Aplica una gota en la parte frontal de la perforación y otra gota en la parte posterior de la misma. Gira solo a partir del cuarto día desde la perforación cuando hayas aplicado la solución 180 grados hacia un lado y 180 grados de vuelta a su posición original. Repite este proceso por la mañana y por la noche.

6. No utilices nunca productos desinfectantes comunes

Los desinfectantes como alcohol etílico 96º, agua oxigenada o povidona yodada que pueden resultar en la irritación de la piel secándola o formando costra alrededor del piercing.

7. No hagas más de dos lavados al día

Mantenlas secas todo lo que puedas. Ten cuidado con los champús y geles corporales y la zona recientemente perforada.

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Componentes: Agua, polisorbato 20, propilenglicol, verdadero extracto de flor de árnica, extracto de flor de manzanilla real (Matricaria), sodio PCA, cloruros de benzalconio, fenoxietanol, propilparabeno, butilparabeno. Volumen: 7 ml Modo de empleo: Después de la perforación, cuide su perforacióndos veces al día con un par de gotas de la Studex After...

Cuidados por zonas

Zona 1. Lóbulo. Es la más fácil de curar, tarda en torno a 6 semanas en curar, en algunos casos hasta 12. Recomendamos no cambiar el piercing con el que hiciste la perforación hasta al menos las 8 semanas. Si encuentras aún molestias, visita al profesional que realizara la perforación y escoge con él si debieses cambiar o no de modelo.

Zona 2. Low Hélix. Esta zona tarda entre 4 y 6 meses en curar. Mantén siempre la zona limpia y antes de cambiar tu perforación revísala con tu piercer.

Zona 3. Tragus, Forward Helix, Rook, Helix, Conch y Contraconch. Los piercing realizados en estas zonas debido a la avascularización de las mismas tardan más tiempo en curarse. Entre 6 y 12 meses.

Zona 4. Antitragus y Daith. Son las zonas de la oreja que más dificultad encuentran a la hora de curarse. Entre 9 y 12 meses de curación para estas zonas.

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Tragus

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Daith

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Etapas de curación de un piercing

Recién realizada la perforación. Al comienzo de la curación, tu piercing estará sensible y dolorido, además estará inflamado en apariencia. Lo normal es sentir molestias leves en este momento. Sé particularmente cuidadosa en esta etapa de la curación.

Curación. Cuando el dolor inicial ha desaparecido, el piercing entrará en la fase de curación. Los piercing curan desde el interior, es por eso que requiere algún tiempo para curarse y requiere paciencia. En esta etapa, deberías tener aún cuidado con el piercing y continuar con tu proceso de curación. Puede que sientas de manera ocasional molestias y la zona sensible.

Completamente curado. Se considera que un piercing está curado una vez que has pasado el tiempo medio de curación si has realizado el proceso de manera rigurosa y cuando las joyas se sienten bien sin ningún tipo de molestia.

Recuerda, es tan importante como curar el piercing, cambiarlo una vez que la inflamación ha disminuido por uno más corto. Siempre que sea de un material hipoalergénico, deberías ir a tu diseñador de piercings y cambiar la barra de perforación por una más corta. En el momento de realizar la perforación, la barra que se utiliza es larga para acomodar el piercing cuando se inflame. La reducción del tamaño de barra se deberá hacer para que el piercing por torsión no cambie su forma ni trayectoria.

Si aún no te has hecho ninguna perforación y no tienes claro hacértela, hay otras opciones como los earcuff. Así podrás ver cómo te quedarían distintos modelos en la perforación que quieras. Bien colocados no se pierden ni hacen daño. Póntelos cuando más quieras y quítatelos el día que no te apetezca llevarlo.